Capítulo 163°: "Party".

"Es tiempo de fiesta".

Luego de hacer el amor, caímos rendidos en la cama. Ella entre mis brazos, los dos cubiertos por las sábanas color pastel de la cama. Como de costumbre, esperé a que se durmiera, para admirar su angelical rostro dormir acobijado entre mis brazos.

…Al día siguiente…

Desperté y me giré para ver si ella seguía allí. No estaba, de seguro estaba dándose una ducha. Hoy iríamos a la fiesta de los Oscars y ella tendría allí la presentación con los de One Direction. Era la primera vez que presentaban en vivo su dueto.

La puerta de la ducha se abrió, y como tantas veces antes, ella salió vistiendo así http://www.polyvore.com/cgi/set?id=44790476&.locale=es, con una sonrisa en el rostro. Creo que comenzaba a odiar la remera que traía puesto, se le veía todo el sostén negro y eso… no era muy de mi agrado.

—Hola cariño —me saludó simpáticamente. Mis ojos no salían de sus bronceadas piernas.

—Hola, amor —respondí y regresé mí vista a su rostro—. Odio esa remera —ella se miró y me miró a mí, otra vez.

—¿Qué tiene? —preguntó arreglándosela sonsamente.

—Se te ve todo —me quejé. Ella sonrió y se acercó para besar mis labios levemente.

—¿Vienes conmigo? —me preguntó, no sabía a dónde iba.

—¿A dónde vas? —respondí con otra pregunta.

—Nerea tiene mi vestido para la noche, bueno —suspiró— mis vestidos —parecían ser dos o más.

—Oh, ya. Pero primero voy a darme una ducha —después de tanta acción, debo bañarme.

—Ya, ve —me pidió entre risas. Creo que pensábamos lo mismo.

Besó mis labios y se marchó de la habitación.

Narra ___________(tu nombre):

Bajé las escaleras y me senté en una de las sillas del comedor. Tenía algo de hambre, así que arrastré mis tacones hasta la cocina. Abrí el refrigerador y había pastel. Corté un trozo y lo puse en un pequeño plato. Me serví algo de jugo de naranja y me fui a la sala. Me senté frente al televisor y después de días, por no decir meses, sin sentarme a ver los programas de la TV la encendí. Comencé a cambiar los canales, hasta que encontré algo que me entusiasmó. Estaban dando Bob Esponja. Dejé allí y me dispuse a mirar mientras desayunaba.

—¿Miras a Bob Esponja? —preguntó Justin divertido entrando a la sala un rato después de que yo lo hiciera. Yo volteé y le sonreí.

—Me gusta Bob —le comenté divertida. Él se sentó a mi lado.

—Lo sé —dijo divertido—, me gustaba verlo con Jazzy.

—Hace mucho no veo a Jazzy —extrañaba eso.

—Lo sé —afirmó. Sé que él tampoco—. Extraño a Jazzy.

—No te pongas triste —le pedí acariciando su mejilla. Odiaba verlo triste.

—No, ya —sonrió—. Luego llamaré a papá para hacer un Twitcam con Jazzy y Jaxon —era una buena idea.

—¿Ya vamos? —le pregunté. Él dirigió su mirada al pastel y tomó un trozo con la cuchara para luego comerlo.

—Vamos —me respondió con la boca llena.

—Eres un asco —le informé divertida mientras me levantaba, al igual que él.

Él me abrazó por la cintura y salimos de casa. Nos montamos en su auto y él comenzó a conducir.

—¿Tienes más de un cambio? —seguramente sí, por la presentación.

—Sí —me respondió—. Es que Nerea necesita que use otro vestido para la presentación —se quejó ceñuda.

—¡Es absurdo! —protestó—. No habrá fans allí dentro. Solo las personas que van a la fiesta —me explicó.

—Lo sé —todo mundo sabe eso—. Solo es que Nerea quiere que cada detalle esté planificado y perfecto —y de cierta manera está bien.

—Pues, sé lo que se siente. Cuando recién comenzaba Scooter era así —me explicó—. Ahora… solo ya sé que debe ser así para que las cosas funcionen —añadió.

—Es que Nerea no entiende que no me importa si el vestido es Dolce & Gabanna o si no tiene marca, si lo usé 1.000 veces o si es diseño único. Pero… —suspiré y me encogí de hombros.

—Lo sé, lo sé —intentó “consolarme”.

—Para tu comodidad, son dos vestidos —le avisé divertida. Él suspiró y sonrió aún viendo la carretera.

—Por fin Nerea no me hace morir de un infarto —comentó divertido. Sonreí.

—Oye, yo no me quejo cuando exhibes tus calzones —me quejé divertida. Él también rió.

—Es que estos pantalones se me caen —se escudó—. Mira, por ejemplo hoy estás con un short súper corto y con esa remera transparente. Deberías acudir a la túnica —reí divertida. Exageraba.

—¡Justin! —me quejé—, no se me ve nada, sonso —en realidad, no se me veía nada de nada.

—Pues, para mí sí —me contradijo—. Digo… ¡ven tu bra! —exclamó mientras se detenía en el semáforo.

—¡Justin! —protesté divertida—. No seas sonso.

—¡Me llevó 3 años verte en bra! Ponte una camisa —me exigió divertido.

—¡Bieber! —volví a protestar. Él solo reía—. Estás diciendo que hiciste todo lo que hiciste durante tres años para acostarte conmigo —me quejé.

—¡No! —dijo alarmado mientras seguía el camino luego de que el semáforo indicara el color verde—, nunca en tu vida pienses eso.

—Lo sé, Justin —yo no podía pensar nunca eso de él; siendo que él era tan lindo y dulce conmigo.

—Jamás creas eso de mí, ¿vale? —me pidió—. Porque antes de ser esa clase de hombre, prefiero morir. Yo nunca buscaría a una mujer por sexo. Es más, no buscaría a otra mujer, porque te amo con locura, mi amor —cada día estaba más convencida de que casarme a los 19 años, no sería para nada un error, al contrario.

—¿Por qué eres tan dulce? —mascullé enternecida. Él sonrió.

—Mamá me enseñó que el respeto hacia la mujer es lo primordial —me informó—. Además, me crié solo con una mujer, el único hombre que tenía cerca es mi abuelo. Mamá me crió con su romanticismo y todo y mi abuelo, que era quién podría mal enseñarme “masculinamente”, está criado a la antigua, como los verdaderos hombres —me explicó divertido.

—Pues, cuando vea a mi suegrita la felicitaré —le advertí. Justin rió por lo bajo. Amaba verlo sonreír.

—Te amo, te amo, te amo —repetía sin parar. Amaba que haga eso.

—Te amo, mi amor. Te amo como jamás amé a nadie en la vida —y nunca lo haría además de él.

—¡No hagas que quiera besarte ahora! —me rogó. Claro, iba al volante.

—¡Sonso! —me quejé e inclinándome besé la comisura de sus labios.

Llegamos a casa de Nerea y bajamos. Justin solo lo hizo de colado, quería ver si mi hermano seguía allí o no. Toqué timbre y, casi no sorpresivamente, nos atendió Michael.

—¡Michael! —exclamé sorprendida. Justin comenzó a reír mientras se daban la mano.

—Hola bro —saludó mi novio a mi hermano mayor.

—Hola —sonrió.

—¡___________(tu nombre)! —exclamó Nerea y me jaló hacia dentro—, por favor. No digas que Michael se quedó aquí, ¿va?

—Ya, no hay problema —me extrañaba su petición.

—Es que Alison no quería que se quedara —me explicó antes de que pudiera cuestionar el por qué.

—Ya, no arruinaré tu noche de felicidad —dije divertida. Ella sonrió—, ¿tienes mis vestidos? —pregunté.

—Sí —me afirmó—. Creo que te encantarán —añadió.

—¡Genial! —sonreí ampliamente.

Ella me condujo hasta su habitación y me mostró los vestidos. Michael y Justin estaban abajo. Regresé con los vestidos en un porta ropa y con Justin nos fuimos.

…Antes de la fiesta…

Justin ya se había cambiado. Traía un traje azul oscuro, zapatos negros y su cabello correctamente peinado. Yo luego de bañarme, peinarme y maquillarme me cambié así http://www.polyvore.com/cgi/set?id=44890221&.locale=es. De todos los vestidos que Nerea eligió para mí, era en realidad mi preferido. Era bellísimo. Tomé mi bolso de mano y bajé hacia la sala, en busca de Justin.

—¡Mi amor! —exclamó él poniéndose de pie para verme—, ¡estás hermosa!

—Gracias, cariño —sonreí—. También estás muy apuesto.

—¿Ya nos vamos? —me preguntó— Debo avisarle a Kenny —añadió.

—Sí —afirmé. Sonriendo.

Luego de unos segundos en los cuales me encargaba de arreglar perfectamente mi peinado, Kenny llegó. Nos subimos al auto y él condujo hasta el lugar de la fiesta. Allí bajamos. Posamos en la alfombra roja y nos metimos a la fiesta.

El clima estaba muy lindo, el lugar de la fiesta estaba repleto. Justin enredó sus dedos con los míos y se acercó a mi oído.

—¿Buscamos a Jaden? —no iría a negarme.

—Claro —acepté. Teníamos la misma mesa en la cena, era, creo, que la 13.

—Bien, oye… —dirigí mis ojos a los suyos—, ¿te he dicho que te encuentras hermosa hoy? —seguramente me habría hecho sonrojar.

—¡Justin! —me quejé—. Sí lo habías hecho.

—Pues, no lo sé —se encogió de hombros—, pero te ves perfecta —me aseguró.

—Ya, vamos a la mesa antes de que te pongas meloso aquí, donde pueden aparecer fotos —le pedí, básicamente, empujándolo para que camine.

Caminamos entre el pasillo que nos dirigía a la mesa 13. Saludamos varias veces elevando la mano o “reverenciando” con la cabeza a alguna persona que saludaba desde las mesas. A unas dos o tres mesas divisé a Jaden también estaba Willow —su hermana—, Zayn, Niall, Louis, Liam y Harry. Dos sillas estaban vacías, eran las nuestras. Nos dirigimos hasta ellos, sonriendo.

—¡Oh! Ha llegado la pareja de tortolitos —nos cargó Jaden. Sonreí divertida.

—Hola, ___________(tu nombre), Justin —saludó Willow.

—¡Hi! We’re one direction —reí, ellos siempre lo hacían.

—Son sonsos —les informé—. Y… hola chicos —saludé a los Smith. Justin abrió mi silla y me senté. Luego él lo hizo.

—Hola chicos —saludó Justin. Willow y Harry le sonrieron. Los demás solo, ya habían saludado.

—¿Nerviosa? —preguntó Louis. Creo que me lo preguntó a mí, ¿no?

—Sí, bastante —reí divertida.

—Todo saldrá bien —se entrometió Willow—. Aún recuerdo la presentación en los PCA, fue impecable —sonrió y dirigió su mirada hacia mí—. Todas tus presentaciones son impecables —sonrió.

—Déjame alagar tu trabajo —le pedí sonriendo—. Yo creo que eres la sucesora de Beyonce —Willow rió algo sonrojada.

—Lo mismo le dije —me informó Liam—, pero ella lo niega.

—Es que Beyonce es lo máximo —nos recordó.

—También eres lo máximo —se entrometió Justin.

—Gracias, chicos —sonrió.

Cenamos divertidos. Varias personas de las presentes se acercaron y se tomaron fotos con algunos de nosotros. En realidad, el clima era lindo. Pero luego de cenar debía ir a cambiarme. Le avisé a Justin y pidiendo permiso me levanté de la mesa. Caminé hasta el baño y allí me cambié así http://www.polyvore.com/cgi/set?id=44966664&.locale=es, salí de allí y por la parte de atrás me dirigí al pequeño escenario que había. Todavía estaba atrás, abajo. Cuando vi a los chicos llegar.

—¡Oh yeah! Lindo vestido —dijo Louis sonriendo.

—Gracias —sonreí.

—¿Lista? —me preguntó Zayn.

—Ella siempre está lista —le informó Harry divertido. Sonreí y asentí.

—Todo saldrá bien —les aseguré.

—No lo sé —se quejó—, yo solo quería bailar ballet sobre el escenario —bromeó Niall. Liam comenzó a reír, al igual que yo.

—¡Ya, ya! —nos frenó de la diversión Zayn—. Es hora —añadió.

—Va, suerte chicos —les deseé.

—Igual —respondió por ellos Liam mientras me acariciaba la espalda amistosamente.

Los primeros acordes de la canción sonaron. El primero en cantar, era Niall.

—It’s the music in my heart

Is your smile in the night

The beat of a hip-hop

Invading me he-he-heart —cantó mientras salía al escenario con el ritmo de un hip-hop algo pop.

—At the disco with my music

Dancing on the floor

I see people, I see the desire

More, more fun —cantó Hazza saliendo al escenario.

—All dance with the heart on the floor

His feet move to rhythm of the song

You’re leaving me, Darling, our song?

Return, return, dance on the floor, my love —fue lo que canté mientras entraba al escenario. Todos miraban atentos. Era la parte del juego del show. Las luces del escenario se apagaron. Era cuando la coreografía empezaba. Los demás entraron, me refiero a Zayn, Louis y Liam. Entonces, cuando todos estábamos de espaldas las luces volvieron.

—Give me my shoes

The keys to my car

So to be raining and your name cause storm

My heart will dance on the floor.

One, two, three. Stop this time

Take off the idea I’ll mourn

No matter where you are, no matter the place

My heart is on the floor dance night —lo atractivo de la coreografía era que todos cantábamos y bailábamos de espaldas en una línea. Era original.

—Do not move your hands,

Your feet will be responsable

As if it will float in the clouds

Only in the club are —cantó Zayn.

—The night becomes short

If you are moving

You go with him and I’m here without you

My heart just dance, dance to foget —cantó Louis.

—All dance with the heart on the floor

His feet move to rhythm of the song

You’re leaving me, Darling, our song?

Return, return, dance on the floor, my love —esta vez lo cantó Liam. Para luego comenzar con el estribillo y la coreografía, esta vez bailábamos de frente.

—Give me my shoes

The keys to my car

So to be raining and your name cause storm

My heart will dance on the floor.

One, two, three. Stop this time

Take off the idea I’ll mourn

No matter where you are, no matter the place

My heart is on the floor dance night —la canción terminó. Saludamos y bajamos del escenario.

—¡Salió perfecto! —comentó Harry sonriendo.

—Gracias, chicos —sonreí—. Me divertí mucho allí arriba —Louis me sonrió enternecido.

—Eres tan tierna, carrot —reí divertida. Louis me decía así de sonso que es.

La fiesta pasó rápido. Nos divertimos mucho. Luego de esto con Justin nos dirigimos a casa.

—Me divertí —afirmó él cerrando la puerta.

—Mis pies están muertos —me quejé quitándome los zapatos.

—Vamos, te cargo hasta arriba —se ofreció sonriendo.

—No —me negué. Pero él me alzó, algo así como lo hacen los recién casados, y comenzó a subir las escaleras—. No me haré cargo de tus daños físicos —le informé.

—¿Qué daño físico podría causarme cargar a una pluma? —preguntó y besó mi mejilla tiernamente.

—Te amo —le informé rodeando su cuello con mis brazos.

—¿Sabes qué hora es? —me cuestionó.

—No —respondí.

—Las 11:58 p.m —me informó.

—¿Y eso qué? —me hice la loca. Él rió.

—En 2 minutos, tendrás 19 años, mi shawty —me recordó. Solo lo hizo por hacerlo, él sabía que yo estaba haciéndome la sonsa.

—Sí, sonsito. Al menos todavía no olvidé mi cumpleaños —le dije divertida. Él, no sé cómo, abrió la puerta de la habitación y me depositó en la cama.

—Cada día falta menos para que seas la esposa más linda del mundo —me sonrió enternecido.

—Eres dulce, Just —lo describí.

Su teléfono comenzó a sonar, él me besó con dulzura, lentamente. Amaba sus besos.

—Felices 19 años, mi amor —me saludó sonriendo.

—Gracias, mi vida —le agradecí y él… volvió a besarme.

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¡Chicas! Les subo rápido porque estoy con prisa. Responderé los comentarios en la próxima entrada. Las amo (:

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—Poly—

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