—¿Quién habla? —preguntó la voz del jodido
drogadicto.
—Justin Bieber. El novio de ___________(tu
nombre) —no me hacía cargo de nada de lo que podía hacer. Estaba totalmente
cegado. Mi novia, solo no hacía nada.
—¿Qué quieres tú? —preguntó con cólera al oír
mi nombre—, estaba hablando con la zorra de tu novia, no contigo.
—¿Zorra has dicho? —pregunté con rabia. Si
había peor cosa en el universo era decirle zorra a una mujer. Más si era la que
yo más amaba en el universo entero.
—Pues, sí —al parecer lo tomaba como algo
normal. Digo, su tono no decía lo contrario—Es lo que ella es. Me dio la vuelta
con Ryan, ¿por qué no lo sería? —era un descarado.
—Eres un idiota, pero te advierto algo,
malito estúpido. Llegas a tocar a ___________(tu nombre) una vez más y te
reviento la cara. Ni siquiera me interesa caer en la cárcel o lo que sea. Te
juro que te desfiguro.
—Uh, ¡qué miedo! —su tono burlón me daba más
rabia aún— un marica me amenaza. Ella
siempre será mía, quieras o no.
—Creo que te equivocas, pues nadie es dueño
de nadie —lo sé, mi filosofía era un poco irracional conmigo mismo— y aún así
defenderé a ___________(tu nombre) pese lo que pese, porque yo no quiero
violarla. Yo quiero amarla y protegerla de los idiotas, como tú.
—Pues, no lo haces. Es imposible que lo
hagas —era él un delincuente.
—Mmj, ¿tú qué sabes? Solo quieres lo peor de
las mujeres —sé que se la tomaría a mal y eso realmente me resbalaba.
—Chúpame un huevo, Bieber.
—Disculpa, no hago tu trabajo, gracias —no
caería tan bajo.
—¡Aww! La niñita es modesta —dijo con ironía—
date por muerto, estúpido.
—Cuando desees, marica —no me estaba
controlando ya más.
Él solo colgó el
teléfono. Creo que no tenía agallas suficientes como para escuchar más de su
putrefacta vida.
—Tengo miedo —me
afirmó un poco asustada mi novia mientras yo volvía a conducir.
—¿De él?
—Sí, es un demente.
Será capaz de cualquier cosa.
—Oye, linda —dije
sin poder verla a los ojos. Era imposible, iba conduciendo— yo te protegeré
cueste el precio que cueste. Y lo sabes, daría mi vida por ti.
—No quiero que él
te lastime —me confesó ella frustrada, más bien angustiada.
—Y no lo hará —Debía
darle seguridad, no hacerla morir del miedo y la culpa.
—No sabes de lo que
es capaz Billy —me interrumpió ella exasperada irrumpiendo en llanto—, Justin
quizo violarme. Tengo miedo de que vuelva a intentarlo.
—¡No digas eso! —odiaba
verla llorar, me desesperaba— ___________(tu nombre) él no te tocará ni un solo
pelo porque te juro que lo haré meter preso. Haré yo la denuncia. Yo me encargaré
de verlo morir en una maldita celda.
Ella solo no decía
nada, no hacía nada más que llorar. Era tan frustrante verla así, odiaba esta
situación. No sabía cómo hacer que ella estuviera bien.
—Por favor, linda,
ya no llores —le pedí—, me hace mal verte así.
—Es que no puedo —me
respondió con voz ronca—, me hace demasiado mal escucharlo decir tantas
asquerosidades de mí —añadió casi sin voz.
—¿Estás bien?
—Quiero regresar a
ser una niña y corregir todos los errores de mi jodida vida. Realmente estoy
cayendo lento.
—¡Deja de ser así!
Ese plan no es el tuyo, el que construimos juntos —me quejé—, ¿dejarás que un
idiota nos rompa? Pues yo, no.
—¡Justin, no quiero
que él te lastime! —no quería que gritara, pero casi lo hacía y era peor. Poco
se la escuchaba.
—No te alteres, te
hará peor —dije.
—Descuida,
enseguida se me pasa —me comentó viendo la carretera por la ventanilla— ¿Falta
mucho?
—Sí.
Ella guardó
silencio, pero aún así por el reflejo del vidrio podía ver como lloraba. Odiaba
esto, era estúpido. Es jodido como una llamada de 3 minutos te caga la vida, es
irreal. No existe explicación lógica.
Conduje todo el
camino con un nudo en la garganta y a eso de las 08:05 llegamos al restaurante
donde comeríamos con mi bella novia.
—Aquí es —dije
mientras entraba en el estacionamiento.
—Es un lugar súper
elegante y yo así vestida —se quejó prácticamente en mudo ella.
—Estás pálida —comenté
viéndola a la cara.
—Son los nervios —me
informó ella. De todas formas no se veía “saludable”.
—¿Segura?
—Sí, no es nada —insistió
mientras se quitaba el cinturón.
Bajamos de la
camioneta y ya era de noche. Hacía mucho frío. Así que rápidamente entramos al
lugar. Nos sentamos en una mesa cerca de una de las ventanas y pedimos
spaghetti a la boloñesa.
—Me preocupa verte
así —le afirmé con un tono dulce.
—Enserio, no es
nada.
—Te veo mal —insistí
yo.
—Pero, no es así —sé
que mentía—, enserio. Solo son los nervios. Me juegan una mala pasada y ya.
—Bueno, si te
sientes mal me dices eh —le pedí.
—Sí, claro, bonito —sé
que ella estaba angustiada por lo de Billy. Y debo admitir que mi rabia seguía
allí.
—Señor, señorita
sus órdenes —dijo el mozo mientras las dejaba sobre la mesa— ¿se les ofrece
algo más?
—No, muchísimas
gracias —respondió rápidamente ella y el mozo solo se fue.
—Se ve rico —intenté
arreglar todo.
—Quiero ver a papá —eso
me dejó helado.
—¿Qué? —solté con
torpeza.
—Necesito hablar
con él. Necesito que mi vida vuelva a ser lo que era —odio a ese engendro de
Billy. Maldito maricón.
—¿Te irás? —pregunté
con algo de decepción.
Narra
___________(tu nombre):
Sé que él, Justin,
cree que soy una idiota. Pero sé de lo que es capaz Billy y no quiero que nada
le suceda a mi bello Justin. Si Billy llega a tocar a Justin lo destroza de un
solo puñetazo. Billy es un demente y Justin no podrá evitar eso. Debo
protegerme yo y proteger a lo que más amo en todo el universo. Debo elegir
defenderlo y si eso implica que me aleje de él, deberé hacerlo.
—No lo sé —mentí—,
no quiero que nada malo pase.
—Si te vas pasará —sonó
tan pesimista de su parte.
—Y si no lo hago
también —le afirmé con un hilo de voz. Mi jodida garganta fallaba de nuevo.
…2 meses después…
Todo había acabado
aquella noche, ese 25 de diciembre mi mundo se derrumbó por completo y volví a
creer que la vida era un poso oscuro donde algunos veían la luz y los demás
solo oíamos de ella. Mi relación con Justin no llegó a un final feliz, solo una
separación dolorosa. No hubo terceros, solo Billy jodiendo con amenazas y
estúpidos juegos. Los chicos, ellos… ellos son felices. Chaz y Cait siguen muy
felices juntos. Chris pues, él se dedica a sus vídeos. Ryan sigue con Milagros
y Justin, bueno, ya no sé nada de él. No está en Los Ángeles, creo que se
regresó a Atlanta por grabaciones, solo me junto con Jay, Cody y Cait. Son las
únicas personas con las cuales mantengo relación. Mi trabajo consume mucho de
mí. Mañana sale a la venta mi CD. Pero, no encuentro sentido, Justin no está
aquí. Y solo el destino y el tiempo pueden hacer que todo vuelva a ser como
antes.
—¡Belleza! —exclamó
Alison entrando al estudio.
—Oh, hola —saludé
casi sin ánimos, estaba cansada.
—Estás agotada —comentó
Usher.
—Solo un poco —no
quería exagerar.
—Tengo una buena
noticia —no creo que así sea. Al menos sé que no dirá: “Justin está aquí” o algo
así. Entonces, no es buena.
—Dime —no
despreciaría de todos modos.
—Tienes una
presentación la semana entrante —me afirmó ella sonriendo.
—¿Dónde? —cuestioné.
—Atlanta —añadió
muy feliz.
—¿Enserio? —sería
mi oportunidad de ver a papá, José y Mich.
—Sí.
—¡Oh, es genial! —exclamé.
Pasé casi todo mi
día en el jodido estudio. Luego me regresé a casa. Estaría sola toda la semana.
Mamá se fue con Nicholas a Londres, una vez más.
—Hola, ¿se
encuentra Caitlin? —pregunté a través del teléfono.
—Ella habla —dijo
mi mejor amiga— ¿___________(tu nombre)?
—Sí, soy yo —afirmé
mi personalidad simpáticamente— Oye, ¿te quedas a dormir aquí hoy? Estoy sola.
—Oh, ¡sí, claro!
También estoy sola —me afirmó ella.
—Ok, ¿vienes ya? —solo
quería saber.
—En 5 minutos estoy
ahí.
Ella colgó. Me metí
en el baño y me arreglé un poco, subí a mi habitación ordené mi desorden un
poco y regresé a la sala, justo fue cuando tocaron timbre, de seguro era Cait.
—¡Oh Dios! —exclamó
ella y entró.
—¿Qué sucede? —pregunté
al verla tirarse en el sillón.
—Hace mucho no
venía a tu casa —añadió vagamente.
—Me preocupaste,
boba —me quejé y sonreí mientras me sentaba en un sillón individual.
—No debes
preocupar. Solo estoy loca —al menos lo admite.
—Lo sé, es de
notarse —le comenté burlonamente.
—Y bien, ¿qué
haremos? —cuestionó enérgicamente.
—No lo sé, tú dices
—le informé.
—Quiero preguntarte
algo —me dijo ella.
—Dime.
—¿Es verdad que
estás saliendo con Cody? —añadió curiosamente.
—¡Beadles! —protesté—,
claro que no.
—¿Segura? —insistió.
—Sí, ¿por?
—En la red hay
fotos en las cuales se los ve muy cariñosos cenando en el sushi del centro,
entre la 3era y la 4ta.
—Solo somos amigos —afirmé.
—Mmh, no parece.
—Enserio —insistí
ante su falsa acusación.
—Sé que a él le
gustas —me afirmó ella.
—Quizás, pero
realmente yo no quiero nada con él —sonó tan frívolo.
—¿Por qué? —ella
quería que sucediera algo—, él es lindo.
—Sí, claro —dije
con sarcasmo— ¿porqué no estás tú con él?
—Solo decía —se
escudó ella— pero admite que es lindo.
—Sí, lo es. Es muy
lindo y aún así, no es nada más que mi amigo.
—El cuál te escribe
canciones y te hace aparecer en vídeos, te regala rosas, te lleva a cenar.
Vamos, admite que te está robando el corazón —Cody era genial, pero mi corazón
era de Justin.
—Sabes que amo a
Justin —solté.
—Y también sabes
que los dos tienen distintos caminos ahora y que quizás ya no estén nuevamente —tenía
razón—, debes darle una oportunidad a Cody. Es un gran chico y te quiere, te
quiere mucho.
—Es difícil —mi
orgullo no se va.
—Pero no imposible.
—Lo sé, pero no me
le tiraré encima a decirle: “Sé mi novio”. Pues quedaría como puta.
—Vamos, tú le dices
algo y él te muerde —era una forma de decir nada más.
—Claro, sí. Iré y
le diré: “Cody, quiero tener algo contigo para olvidar a Bieber” —era irónico—,
no puedo. No puedo hacerlo.
—Tú solo préstale
atención a Cody, a sus indirectas y verás como todo fluirá.
Mi teléfono vibró y
era un mensaje, lo abrí y decía así.
“Ey, ey. Lindura,
¿cenamos hoy? L.A está bella como tú y estoy solo. Ni siquiera Mark me quiere,
jaja. Espero un sí de respuesta, belleza con patas. Te quiero muchísimo. –Cody”
Instintivamente a
leer eso sonreí.
—Es Simpson, ¿no? —preguntó
Cait. Y me olía a que tenía que ver con ella.
—Sí, es él —afirmé.
—¿Qué te dice?
—cuestionó Cait curiosamente. Se emocionaba más que yo.
—Me invita a cenar
esta noche —le respondí— pero estás tú aquí —linda excusa, ¿no?
—Pff, no lo tomarás
como excusa. Irás —me informó ella. Creo que me obligaría a ir.
—¿Y tú? —evadí su
exigencia.
—Yo saldré con Chaz
—sentenció—, y tu irás.
—Ok, iré —le
respondí por obligación.
—Te pondrás
hermosa, bueno más de lo que eres, y terminarás de robarte el corazón de Cody
—me informó ella sonriendo simpáticamente.
—Como digas
—acepté.
Tomé mi teléfono y
le respondí a Cody:
“Oye, sí iré :) Te
espero a las 8:00 en casa, te esperaré. Un beso, te quiero”.
Y sí, no me
regalaría. Además, no sé porqué lo hago. Tengo bien en claro que el único chico
dueño de mi corazón es Justin. No puedo seguir sin él, pero como dice Cait,
tenemos caminos separados y por más que sea ahora tengo una vida complicada y
debo seguir con ella, quiera o no.
Junto con Caitlin
subimos, yo me duché mientras ella analizaba cada detalle de mi guardaropas.
Salí de mi baño y me cambié así http://www.polyvore.com/cgi/set?id=39066109&.locale=es, Cait me maquillo naturalmente y me hizo
algunos rulos en el cabello. Estaba muy linda, pero… no sentía que hoy sería
una noche especial. Quizás Cody pueda hacerme sentir que sí. Eso espero.
—Estás hermosa
—comenzó a alagarme mi amiga—, ¿por qué esa cara?
—Es difícil Cait,
aún no supero a Justin. Lo amo con lo que soy y pensar que el estúpido de Billy
se metió y nos alejó porque amenazó a Justin de muerte, es digno de castigarlo.
Pattie ni siquiera me saluda igual Kenny y Scooter. Todo gracias a la amenaza.
—me quejé.
—___________(tu
nombre), si el amor de Justin es verdadero como el tuyo, volverán. El destino
no podrá mantenerlos separados. Solo, dale tiempo al tiempo —Cait era una chica
muy fuerte y positiva.
—Quizás sea así,
pero ya pasaron 2 meses y estoy peor que nunca —confesé. Era con ella la
primera vez que hablaba desde hace 2 meses. Nadie más logró sacarme palabra de
Justin.
—Por eso mismo
quiero que salgas con Cody. Él es un buen chico y te cuidará —me informó.
—Lo sé, pero no
quiero jugar por sus sentimientos.
—Y no lo harás.
Porque yo sé que si te dispones a tener algo con Cody lo querrás mucho. Él es
dulce y además está intentando robarte el corazón hace 2 meses, no es tan
difícil. Solo préstale atención y ya —tenía razón. Cody intentaba conmigo desde
que terminé con Bieber. El timbre irrumpió nuestra charla.
—De seguro es Cody
—comenté.
—Ve y conquístalo
por completo —me dijo ella sonriendo—, Chaz viene por mí en media hora.
—Está bien. Suerte,
amiga. Te quiero, bye —me despedí.
—Chau, linda —me
saludó Cait.
Me dirigí a la sala
y con el corazón en la boca, de los nervios, abrí la puerta. Allí estaba parado
Cody, al verme sonrió como un idiota. Embobado.
—Hola, linda —me
saludó con un beso en la mejilla.
—Hola —respondí y
sonreí naturalmente.
—Estás bellísima
—apuesto a que Cait estaba espiando desde algún lado.
—También tu
—respondí simpáticamente.
—¿Vamos?
—Sí, vamos.
Nos dirigimos al
carro de Cody y subimos. Él comenzó a conducir hacia el lado sur de la ciudad.
—¿Cómo estás?
—preguntó Cody.
—Pues, bien —no le
diría “mal”.
—No suenas
convencida —dedujo.
—Es que…
—Bieber —me
interrumpió antes de que prosiguiera.
—Sí, Justin —afirmé.
—¡Ash! ¿Por qué no
lo dejas ir? —preguntó—, creo que debes entender que hay cosas más valiosas a
tu alrededor. Además, solo tienes 15 años, tienes toda una vida por delante
—sonó tan paternal. Y… Cait tenía razón. Cody quiere conquistarme.
—Es que es difícil
—lo dije indirectamente— no quiero jugar por los sentimientos de las personas.
—Nadie pretende que
lo hagas —se escudó él.
—Lo sé, pero
quieren que haga algo que no puedo, y si lo hago estaría jugando por una
persona a la cuál quiero mucho —le confesé.
—¿A qué te
refieres?
—Cait quiere que
salga contigo para superar a Bieber —largué inconscientemente.
—¿Enserio?
—Ajá —afirmé mi
comentario—, eso mismo quiere.
—No sería nada
malo, si no fuera para superar a Bieber. Digo, deberías olvidarlo.
—Es imposible.
—No existen cosas
imposibles —me contradijo Cody.
—A veces, sí.
—Olvidar a alguien
no es tan difícil —para él.
—Creo que para mí sí
lo es.
—¿Enserio no te das
cuenta? —cuestionó él.
—¿De qué?
—___________(tu
nombre), después de conocerte escribí “Ángel”, me acerqué a ti, te regalé
flores y chocolates cada vez que pude, te llevé a cenar miles de veces, te
convertiste en mi enamoramiento, realmente eres mi ángel. No puedo quitarte de
mi cabeza —sonaba tan tierno. Pero mi corazón deseaba que Justin fuera quién lo
decía.
—No sé qué diablos
decir, Cody —realmente estaba en blanco.
—No espero que
digas nada, solo… solo quiero una oportunidad —era difícil.
—No puedo, tengo
miedo. No quiero jugar por ti —no quiero si no es con Justin.
—Puedo hacer que
seas feliz —me confesó—, puedo hacer que me quieras. Estoy seguro.
—No quiero promesas
—son horrorosas.
—No prometí nada,
solo te aseguré que puedo —me corrigió él.
—No quiero romperte
una vez más —sí, ¿se acuerdan hace unos meses? Bueno, a eso me refiero. No
quiero que vuelva a suceder.
—Solo quiero
demostrarte que puedo —insistió—, déjame hacerte feliz, por favor.
—Si acepto,
¿prometes no volverte un monstruo? —sí lo sé, soné como Lady Gaga.
—El amor es raro,
pero no cambio por ello —me confesó sonriendo, sin verme claro. Estaba
conduciendo.
—Lo sé —acepté
entre risas.
—Iré despacio.
Primero lo primero —sonrió— conquistarte.
Solo sonreí ante el
comentario y todo se hundió en un silencio. No era incómodo, eso era seguro.
Solo era un silencio distinto a los demás.
Condujo unos 15
minutos, hasta que llegamos a un restaurante muy elegante. Allí bajamos.
—¡Lindo lugar! —no
quería parecer deprimida.
—Sí, mucho —comentó
Cody y a los pocos segundos nos encontramos rodeados de paparazzis.
—¡Cody, Cody!
¿___________(tu nombre) es tu novia? —cuestionó desesperado uno de ellos.
—No, solo es una
buena amiga —respondió él.
—¿Terminaste con
Justin? No se los ve más juntos —¡qué idiota!
—Sí, terminé con él
hace dos meses —respondí con cólera.
—¿Estás con Cody? —a
caso no entienden, ¿verdad?
—¿Saben qué? —me
daba rabia— sí, estoy con Cody. Él es mi nuevo novio —Cody solo sonrió por lo
bajo y me tomó la mano. Me estaba siguiendo el juego.
—Muchas gracias —dijeron
y se largaron mientras nosotros entrábamos.
Nos sentamos en una
mesa reservada de dos personas.
—¿Por qué dijiste
eso? —preguntó él. No estaba enfadado.
—Porque son unos
jodidos —le respondí.
—¿No te importa que
salga en todas las páginas de internet y eso?
—Realmente, no —lo
sé, Justin se enteraría— me da por las bolas —sí, sonó tal vulgar.
—No tienes —dijo
chistosamente.
—Lo sé, pero tú sí —sonreí.
—¡Qué pava! —exclamó
divertidamente.
—Lo sé, mucho —añadí.
—¿Mantendremos esta
mentira parcial? —preguntó él un poco más serio.
—Si eso quieres —respondí
simpáticamente.
—Algo es algo —se
conformó.
—Por ahora —no
quería ilusionarlo pero… yo ya lo había hecho. Maldita yo.
*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*
“Las cosas no
tienen lógica, solo pasan y debes disfrutarlas”.
Mony: ¡Gracias! Me
fue súper genial, rendí muy bien jiji. Y… cuando quieras podemos platicar, la
Twitcam no la hice, porque se me pasó :$ , jaja y bueno te quiero mucho, linda.
Besitos.
Zucely: Hola, por
empezar, me encanta tu nombre :$ ajja. Bienvenida al blog, espero que te guste
n.n Besitos.
Scarlett: Lo sé, es
un maldito (Por decirte/me zorra) Y… bueno, yo estoy súper duper, un poco
cansada pero bien jiji. Y a Cait, no. No le sucede nada malo. Y desde ahora,
entonces, te llamaré Skay :) jiji. Un besito, linda. Te quiero mucho.
Liset: ¡Muchas
gracias, linda! Un beso enorme.
Links:
Polyvore: http://pau225.polyvore.com/
Msn:
pau27_lo.mas@hotmail.com
Blogs:
"Alguien a quien amar" http://alguienaquienamarjbytu.blogspot.com/
"Aprendiendo
a creer en el amor" http://aprendiendoacreerenelamor.blogspot.com/
"Ángel
de mi soledad" http://miangeldesoledad.blogspot.com/
"My
Galaxy The Art" http://mygalerytheart.blogspot.com/
La canción de hoy
es “Ángel — Cody Simpson” creo que ya se las dejé hace algunas semanas, pero es
que me encanta. La encuentro súper tierna y especial. Espero que les guste. http://www.youtube.com/watch?v=McDkw7jVeH8&ob=av2e
Bueno bellezas, es
todo por hoy. Las veré el próximo cap jiji. ¡Las adoro! <3
—Poly—
P/D: COMENTENN!
Uhuhu! Primeeraa!
ResponderEliminarAshh! Maldito Billy..¿Poer qué malogra todo lo bueno que tengoo!? Imbécil...
Casi lloro con el cap, fue muy triste.. :(
Pero...Cody,el rubio teñido xd, Es muuy Re-feo!
Jajaj..enserio! Poly,¿a ti te gusta? :P
Me reí mucho con lo de: "Me da por las bolas".."no tienes" xd Fue muy gracioso! :)
Oye la mierda de Blogger no me deja crear el maldito Blog! Me dice que por la mierda de edad..no sé que..blah, blah,blah!
Y puse que tenía VEINTE AÑOS! Es suficiente no!?..Maldicion...
Enserio,dime cono crearlo porfavoor! Esto me estresa.
Ohoh ya me descargue.
Besito linda,Te quiero muchísimo :)
"Skay"
Pdta: Lo AMÉ! :)
poly!!!!! me encantoooo te lo juro fue un capitulo un pco triste pro aun asi me encanto te felicitoooo (L) bno sube pronto lindaaa
ResponderEliminartequiero (L)
Bonjour, Paula beauté
ResponderEliminarjajaja...hola!!, aquí la paciente Mony reportándose! :)
Fue algo triste el capitulo pero...todos debemos cambiar de ambiente ¿no?, estar con nuevas personas y experimentar!
Gracias por ser mi terapeuta virtual jaja...en verdad me siento mejor desde que hablamos, mas con la frase de Gaga, viste los EMAS?, arraso con todos, pero lo merece, es buenísima en la música.
Bueno, tengo que irme a dormir u.u
Je t'aime, Miss Poly (Te quiero señorita Poly)
Con cariño tu loca amiga Mony
P/D: encontré por casualidad dos canciones con tu nombre, son de Zoé, Paula-Zoé y Poli-Zoé :)
Poly ya estoy lista! Espero que te pases por mi blog: http://dreamcametrue-justinbieber-y-tu.blogspot.com/2011/11/welcome.html
ResponderEliminarBesos. :)
Pooli! Hola :3 Haha :$ Gracias & Graciaas De nuevo Por Lo Del Nombre Y La Bienvenida Al Blog :$
ResponderEliminarAme El Cap, Definitivamente Eres La Mejor Escritora :$
Siguelaaa! :)
Hehe.. Olle una pregunta.. Es rara pero bueno.. Si te mandaran a un cole solo de chicas, que harias? :$ ya solo eso!
Se Te Quiere, Polii!
Sigue La Nove :D
Abrazos
Zucely~♥