Capítulo 183°: "Si quieres volver, estaré esperándote".

"Las cosas no cambian, nosotros cambiamos".

—Te vez bien así —me avisó Harry antes de que intentara seguir maquillándome o arreglándome más.

—¿Ya vamos? —le pregunté. Él asintió y se puso de pie. Mágicamente noté que estaba cambiado, traía jeans azules, una camisa a cuadros negra y blanca y zapatos negros.

Salimos y los chicos corrían emocionados por los pasillos, cambiados y arreglados. Alison sentada en una punta viendo frustrada como ninguno le hacía caso, Robert comiendo donas, Paul viendo su teléfono y los bailarines sentados en el suelo descansando aún.

—¿Qué sucedió? —preguntó Alison preocupada, entonces Harry le hizo unas señas por detrás de mí que alcancé a ver pero no a identificar y ella, Alison, solo sonrió.

—Está todo en orden —se apresuró a responder Harry.

—Bien, ¿ya vamos? —cuestioné, mi voz seguía siendo asquerosa. Pero… no había de otra solución, más que hablar y soportar ese tedioso desafinar en cada palabra.

—Vamos —dijeron todos.

Salimos del pasillo de los camarines, aún la imagen de Justin rondaba mi cabeza tediosamente. Él, simplemente, existiendo en mi mente, me hacía sentir una vil estúpida; había hecho un paso al costado para que él decidiera y sabía que seguramente decidiría por Rosadela, duele y no se imaginan cuanto.

Al entrar al salón había una o dos mesas, luces de colores, la cena servida (tu comida preferida) y al ritmo de Rihanna la música sonaba fuerte.

—Sentémonos —indicó Zayn sonriendo mientras aparecía a mi derecha.

—Hace frío aquí —murmuró Niall. Yo solo sonreí divertida, eso era mentira. No hacía frío.

—Amé cantar con ustedes —comentó tiernamente Louis mientras nos sentábamos en una mesa de 6. Creo que el resto se sentaría en la otra, ya que era más grande.

—Fue divertido —evitando mi final, claro. Todos me miraron sonriendo dulcemente.

—¡Oh, mira! —nos sobre saltó Niall viendo su plato—, ¡es ___________(tu comida favorita)! Mi comida favorita —añadió.

—También la mía —admití entre una leve risa, algo amarga.

—¿Enserio? —cuestionó divertido el chico de cabello dorado.

—Sí —afirmé.

—No quiero irme de México —lloriqueó Liam.

—Nos vamos mañana, luego del concierto, ¿verdad? —creo que Harry tenía menos idea que yo.

—Sí —afirmó Louis sonriendo ampliamente—. Mañana a las 23:00 subiremos al avión —aseguró—. Luego aterrizaremos en 3 o 4 horas en Venezuela —murmuró.

…Al día siguiente…

El segundo concierto fue un éxito. Logré terminarlo sin una crisis de llanto, pero antes de lo que pudiera festejarlo, ya nos encontrábamos en el aeropuerto a punto de abordar el avión. Vestía así http://www.polyvore.com/cgi/set?id=47410319&.locale=es, la noche estaba estrellada. Un resplandor lumínico mínimo caía sobre la tierra donde no llegaban las luces de los faroles. Había viento, pero no hacía frío. Era una dulce noche, esas noches en las cuales solo deseas quedarte en casa a ver una película y comer helado. Subimos al avión y Harry se encargó de llevarme al fondo, alejada de todos y allí nos sentamos. Según él, debíamos hablar.

—Bien, dime —le pedí acomodándome para escuchar.

—¿Decirte qué? —creo que a Harry le afectaba el clima.

—Dijiste que debías decirme algo —le recordé, él sonrió sonsamente y sacudió sus risos.

—A veces creo que tengo problemas de Alzeimer —solo me dediqué a reír, levemente. No tenía ánimos de reír—. En realidad, no debo decirte mucho, solo debo darte algo que alguien quiere que te dé —¿qué sería?

—¿Qué es? —pensé en voz alta. Harry sacó de su bolsillo un sobre blanco, con algunas letras azules en la cara de frente.

—Ten —me ofreció extendiendo su mano hacia mí. Tomé el suave papel entre mis dedos, esperando que no sea de quien yo creía que fuera.

Luego de un movimiento de cabeza de Harry que indicaba que abriera la cara, abrí el sobre. Tomé el papel y lo desplegué.

“Solo respira, ¿lo recuerdas? También yo. Aquel día en Canadá, mi alma se iba contigo cuando partiste a Los Ángeles, sabía que iba a extrañar la idea de pasar navidad con los seres que más amaba si tú te ibas a el orfanato, pero no pude impedir verte sonreír cuando recordaste que era por una buena causa.

Creí que simplemente eras así por caridad, porque te sentías allegada a esos niños como un ser de luz; ser que eres para todos los que te amamos. No creí que ibas a dejarme el camino tan libre respecto a mi confusión con Rosadela, creí que ibas a quedarte a mirar como rompía todo lo nuestro e intentaba entrelazar lazos irrompibles y amorosos, como los nuestros, con la nueva vecina.

Me he equivocado y, en realidad, no he hecho más que perder lo más valioso. No he hecho más que perderte a ti. Yo creía que iba a ser para toda la vida, en realidad sigo pensando eso; ¿no volverás, ___________(tu nombre)? ¿No me extrañas como yo te extraño a ti? Porque a pesar de que esté saliendo con Rosadela, no puedo dejar de pensar en ti. Me creerás un pendejo, lo sé. Pero jamás voy a acostumbrarme a ver tus nuevas fotos con Ryan o sonriendo al bajar del avión con los de One Direction.

No necesito mucho, solo a ti. Me he equivocado y daría mucho porque vuelvas a decirme, solamente, esas dulces palabras que quedaban en mí haciéndome sonreír cuando tú te ibas para regresar a los pocos minutos. Sé que todo el mundo cree que hicimos bien en separarnos, solo por el hecho de que somos jóvenes y para tener 19 y 21, vivir y hacer todo juntos los dos, no es lo más recomendable; pero en realidad para mí, separarme de ti es el hecho más estúpido que he cometido. A mí no me importaba vivir pegado a ti, al contrario. Era lo que anhelaba hacer todos los años que me restan de vida.

Te he perdido y me siento el hombre más estúpido de la tierra. Ahora mismo estoy camino a Francia, sé que estarás aquí en unos meses. Simplemente, me gustaría saber cómo estás, si aún me piensas como yo a ti. Si aún me amas o si me extrañas. Sabes que con solo marcar a mi número voy a estar allí para ti, no lo sé. Correré el mundo si tengo que ir a verte, no me importa lo que deba hacer. Si me necesitas solo avísame.

Yo, ___________(tu nombre), solo voy a pedirte una sola cosa. No odies a Rosa, fui yo quien arruinó lo nuestro. Si quieres volver, estaré esperándote, ¿sí? Te amo, y te extraño mucho, linda.

Justin Bieber.

Mis ojos estaban empapados en lágrimas, no podía dejar de llorar, la idea de que él estaba con Rosadela me partía el corazón. Era un descarado, quería que yo vuelva cuando era él quien tendría que buscarme a mí. Los brazos de Harry me rodearon rápidamente, al ver que solo no hacía más que llorar. Lo mejor que podría haber hecho Harry, habría sido quemar ese puto papel. Mis lágrimas no me dejaban, básicamente ganas de hacer nada. Simplemente hundirme en el asiento de este avión y llorar toda le eternidad por algo que yo misma produje regresándonos a Los Ángeles.

—Sé que eres una luchadora —murmuró Harry acariciando mi espalda comprensivamente mientras sollozaba sobre su pecho—. Has salido de peores cosas, vamos. No es tan malo.

—¿No es tan malo? —cuestioné sarcástica— Esto, simplemente, no podría ser peor, Harry.

(Paris — Francia)

Narra Justin:

Acabábamos de aterrizar en Paris, la ciudad del amor. Hacía muy agradable, apenas eran las 08:00 de la mañana de éste lunes y ya comenzaba mal. Me dolía la cabeza y debíamos irnos al hotel, para la firma de autógrafos. Solo necesitaba que ___________(tu nombre), llamara a mi teléfono diciendo que todo volvería a la normalidad. Que leyó mi carta, que me extraña, que sigue amándome. Que lo dejemos todos y huyamos. Pero hasta ahora, eso no sucedía.

—¿Podrías quedarte quieto, Justin? —me cuestionó Mama Jan, viendo que no dejaba de caminar de un lado hacia otro en la habitación del hotel.

—Scooter ya debería estar aquí —me quejé.

—Suenas como él —comentó divertida mi madre. Ella estaba muy relajada.

—No es verdad —me negué—. Simplemente es que lleva de retraso 10 minutos y debemos bajar a tiempo.

—Quizás esté abajo —dio una hipótesis Kenny.

—Dijo que pasaría por nosotros —respondió mi madre negando la hipótesis de Kenny.

—¡Ya quédate quieto! —exigió mi profesora de voz.

—___________(tu nombre), ¿no ha llamado? —le cuestioné a mi madre. Ella había confiscado mi teléfono, sí. Aún me trata como si tuviera 13.

—No —respondió secamente. Eso me daba sospechas.

—¿Por qué dices así? —fruncí el entrecejo.

—¿Crees que va a llamarte? —soltó sin filtros Ryan, mi estilista.

—Sí, ¿por qué no? —cuestioné yo, confundido.

—¡Eres un ingenuo! —masculló él.

—¿De qué mierda hablas, Ryan? —me enfadaba que me trate así.

—¡La has dejado ir por una aventura con tu nueva vecina! ¿Esperas, enserio, que ella te llame? —creo que estaba burlándose de mí.

—He sido importante para ella —intenté consolarme.

—Sí, lo sé —afirmó Good—. Pero, simplemente, no puedes esperar que una mujer deje su orgullo y dignidad de lado para volver a buscarte. Ella te dejó el camino libre para elegir y cree que has elegido a Rosadela, ¿tú entiendes eso, Bieber? —me cuestionó él.

—Hizo mal entonces —le eché la culpa—. Yo no quería que se fuera.

—Te quedas con el pan o con la torta —me anticipó Ryan. Creo que él tenía razón, mucha razón.

Venezuela (04:00 a.m.)

Narra ___________(tu nombre):

Luego de hablar largo con Harry y dejar de llorar, me quedé dormida sobre su hombro. Nunca esperé quedar dormida en el hombro de Harry camino a Venezuela, pero las cosas no pueden anticiparse; si fuera así, créanme que mi vida no sería así entonces.

—Oye —esos susurros se hacían más fuerte en mis oídos—, oye, ___________(tu nombre) —hasta volverse nítidos.

—Harry —murmuré—, ¿qué sucede? —tenía dolor de cabeza, estaba cansada, me dolían las piernas y mis ojos estaban hinchados. Harry me miraba sonriendo, pero con cara de sueño.

—Estamos en Venezuela —me avisó él—. En 3 minutos debemos bajar y apuesto a que hay paparazzis allí abajo.

—Oh, genial —balbuceé con sarcasmo. Me verían demacrada.

—¡Va! Bailaremos como Shakira —creo que a Harry le hacía mal la altura.

—Shakira es colombiana, Styles —lo corregí. Él solo rió y golpeó suavemente en son de broma mi brazo.

—Al menos ahora me regañas, sonsita —sonrió ampliamente, intenté hacerlo, pero no lo conseguí. Solo aporté una mueca rara—. Me encargué de ordenar tu bolso —me avisó él.

—Gracias, Harry —musité mientras tomaba mi bolso.

Aterrizamos y bajamos del avión. Zayn y Harry iban a mi lado. Yo solo me puse mis lentes de sol, por los flashes y caminé cabizbaja hasta el auto. Robert se encargaría de mis maletas. Me senté en el asiento de atrás, y metí mi cara entre mis manos recostadas en mi falda. Hacía frío, tenía sueño y las palabras que Justin había escrito no se iban de mi mente.

—¡Mierda, hace frío aquí! —se quejó Alison mientras subía.

—Es de madrugada —le recordó Zayn mientras se sentaba a mi lado—, siempre hace frío de madrugada aquí.

—___________(tu nombre), ¿estás bien? —me preguntó Niall. Creo que ya todos habían subido.

—No —respondí secamente. Entonces sentí el brazo de Harry, según supongo, rodear mis hombros.

—Descuiden —les pidió su voz—, yo me encargo.

Llegamos al hotel donde nos hospedaríamos en Venezuela. Al bajar los fans esperaban allí, tomaban fotos y algunos de los chicos se tomaron fotos con ellas. Les sonreí a todo aquel que me llamaba y firmé tres o cuatro autógrafos. Sentía que si seguía firmando autógrafos y estando entre ellos allí, iba a caer desmayada. No tenía fuerzas como para sonreír y estar entera ante mis fans. No quería quebrar a llorar allí, no era justo que ellos me vieran así. Sin mucho que decir o hacer allí, dejando a muchos fans decepcionados corrí hacia adentro. Tenía la llave de mi habitación, por lo que subí las escaleras corriendo y me encerré en la habitación para no ver a nadie, en realidad… solo quería llorar sola.

Me tiré en la cama y me tapé con la manta que traía, ni siquiera me preocupé por Twittear que estaba en Venezuela, es más ni siquiera sabía dónde estaba mi maldito teléfono. Las lágrimas se desprendieron rápidamente y bajaban mis mejillas con velocidad. Simplemente, necesitaba ahogar a mi corazón en esas lágrimas, malditas lágrimas, que ahogaban también todos mis buenos planes. No puedo creer que Justin haya escrito esa carta esperando que regresara, cuando en realidad, es él quien debe volver a mí. Mejor dicho, es él quien debe avanzar hacia mí.

Mi orgullo es grande, yo no puedo darme a torcer. Ya no solo somos nosotros dos, ya hay dos más. Ryan y Rosadela, ellos también sufriría, quiera o no quiera Justin admitirlo. Si Rosadela está con él es porque siente algo por él, tal como Ryan está conmigo. Me siento una traidora, me siento mal, sucia, mentirosa. Pero Ryan sabe que yo amo a Justin, él es el masoquista que está conmigo teniendo en claro que va a sufrir cuando a mí me toque irme. No sé si irme por Justin, es decir irme con Justin o… simplemente irme. Quizás, me toque estar con Ryan, quizás… él pueda enamorarme y llegue a ser importante como lo es Justin para mí. No lo sé, me encantaría hacerlo. Me encantaría saber qué diablos me depara ésta triste historia de amor.

—¿___________(tu nombre), estás allí? —esa voz era de Louis, si mi oído no me falla.

—¡Sí! —respondí sin dejar de derramar lágrimas.

—¿Estás bien? —preguntó él.

—No —me limité decir otra vez—. De todas formas, necesito estar sola.

—Puedo escucharte —me recordó él.

—Está bien —titubeé dubitativa. Me levanté de la cama y abrí la puerta de la habitación. Antes de que alguien más quisiera entrar o más bien, pudiera, jalé a Louis dentro de la habitación—, ¿los demás? —pregunté enjuagando mis lágrimas con los puños de mis manos.

—Siguen abajo —murmuró.

—Me siento mal, Lou —su preocupación aumentó mientras yo me sentaba en la cama.

—¿Qué tienes? —cuestionó desesperado—, ¿estás enferma?

—No, no —respondí rápidamente—. Justin me escribió una carta —vi como su rostro se tensaba.

—¿Sigues llorando por él? —creo que a nadie le agrada esa idea, ni a mí incluso.

—Es difícil olvidarlo, Lou —él suspiró como si esto no tuviera remedio. Creo que él sabe lo que se siente.

—Lo sé —me afirmó—. A veces hasta lo crees imposible.

—No es solo eso —me limité a decir, pero debía continuar. No quería malos entendidos—. Ryan va a sufrir cuando yo deba irme, yo no lo amo. Simplemente es amor de un amigo el que le tengo, él lo sabe y aún así prefiere sufrir. Yo no quiero eso, Lou. No quiero que Ryan sufra por mí —me sentiría culpable, miserable.

—Pero… es su decisión también —me informó.

—Estoy haciendo las cosas mal —todo mal—. Termino de decepcionar a las fans que estaban allí abajo, solo le firmé 3 o 4 autógrafos a algunas y las demás… simplemente, no pude seguir allí. Las decepcioné —me lamenté derramando algunas lágrimas.

—Ellas sabrán entenderlo —aseguró Louis mientras acariciaba mi espalda comprensivamente.

—¿Y si se van, Louis? —pregunté desesperada. Estaba mal y solo una persona podría hacerme sonreír ahora. Solo Justin lograría que yo sonriera ahora—, ¿Y si me abandonan como todos lo hacen?

—¿Crees que van a abandonarte? —cuestionó Louis irónicamente— Yo no abandonaría a la persona que me dice que salga adelante, que las personas que no me quieren solo esconden inseguridad dentro de sí mismos. Que una sonrisa es mejor que cualquier acción interesada o desinteresada que pueda tomar con los otros, ___________(tu nombre) tú no solo haces música. Tú salvas almas. Tú impones sonrisas y eso no cualquiera lo cambiaría por una simple actitud de huir de lo público —mi susceptibilidad aumentaba cada vez más y… ¿quién no lloraría con todo lo que me sucede?

—Me siento débil, Louis —no de salud. Débil de mente, estoy frágil de sentimientos. Ya no puedo sonreír—. Siento que toda la fuerza que adquirí cuando crecí, ha desaparecido.

—Aquí estamos nosotros ahora —creo que se refirió a él y los demás chicos—. Para apoyarte, para llorar contigo, para hacerte sonreír cuando lo necesites.

—Gracias, Lou —sonreí levemente, me reconfortaba solo en pequeñísima cantidad, saber que tenía a alguien con quien llorar ahora.

(Paris — Francia)

Narra Justin:

La noche había llegado ya, el día había sido un total fiasco. Entrevista, firma de autógrafos, conferencia de prensa. Nada muy emocionante, quizás no era eso lo que me molestó. Si no que lo que me molestó fue saber que todo lo que me dijo Ryan hoy, era la pura verdad. Ella no regresaría y si alguien debía arrepentirse y pedir disculpas, era yo. No ella. Aunque eso sería imposible, no puedo lastimar a Rosa ahora. Llevo un mes con ella, es divertida, amable, linda y simpática. Pero nunca podrá compararse con lo que me hacía vivir ___________(tu nombre) con solo mencionar mi nombre en sus labios. Fui un completo idiota y solucionar las cosas ahora me costará más caro que cualquier cosa en el mundo. Tan caro que quizás, no pueda pagar el precio que ella, ___________(tu nombre), me pide. Es como cuando no tienes dinero y quieres comprar en la tienda más cara, sabes que el dinero no va a alcanzarte. Es simplemente querer algo que no puedes tener y aún sabiendo eso, sigues caminando para tenerlo.

Encendí mi laptop y me metí en Twitter. Todo el mundo conmocionado por el Topic Trenging: #EllaNosDioNombre. Al entrar, entendí que se trataba de ___________(tu nombre). Me metí en su perfil y tenía 3 actualizaciones nuevas:

-Lamento lo de anoche, tenía sueño y no me sentía bien. No me odien, Pequeñas Sonrisas.

-Venezuela es bellísimo. Prometo irme sabiendo bailar Merengue Venezolano :)

-¡Ustedes lo han dicho! Son mis #Fighters. Los amo, mis Fighters.

Estaba en Venezuela, seguramente el alboroto del que hablaba lo había producido yo con la carta. Había cambiado su ánimo, conociéndola ella no puede fingir.

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Capítulo dedicado a: Candela (Amiga de Eloise)

Capítulo 181°: Respuestas.

Vitha: Jajaja, me suele pasar lo de las ganas misteriosas de largarme a llorar como bebé. Un beso, linda. Te quiero mucho.

Tamy: ¡Hola Tamy! Bienvenida, es un gusto. Yo soy de Argentina n_n un besote.

Sara: ¡Hola! Sí, todo será purpura (Me gusta el purpura jajaja). Que desaparezca misteriosamente, es hacer daño aunque no lo creas jajaja. Rosadela no es solo el problema, debes pensar que Justin se ha fijado en ella jaja. Claro que terminarás con Justin, si no no sería “novela de Justin Bieber y tú”, ¿no crees? Jajaja. No soy mala, solo le doy suspenso jaja. No me odies. Respecto a tus preguntas: Creo que Pattie es grandiosa, una mujer fuerte y buena. Amo a Pattie, simplemente la amo. Respecto a Selena. Debo admitir que la odio desde Barney. Nunca fue personal, no la tolero desde antes de que sea novia de Justin. De todas formas no soy de esas que quiere ir a buscarla para hacerla sufrir y matarla. En realidad, me da igual. Me gustan algunas de sus canciones y creo que es linda, solo que no me gusta su forma de ser. Aún así odio que sea novia de Justin, aunque si él la quiere y es feliz, allá él, ¿no? Solo no quiero ver mal a Just. Un beso, linda. Te quiero :)

Dahi: ¡Un beso, linda! Gracias. Te quiero.

Ale: ¡Un besote, te quiero montones!

Lelyn: ¡No importa! Internet es una mierda últimamente jaja. Pronto haré la página, lo prometo :) Un beso, linda.

Mony: ¡Hola, amiga! Sabes… nunca he probado un taco, solo sé que dicen y son ricos. Algún día iré hasta México a comprarme un taco y verte jaja. Vas a ser sexy, Justin va a odiar ese vídeo, pero te verás sexy. Ahora es lo que importa jaja. Espero que estés bien, linda. Un besote, te adoro amiga.

Liza: ¡Hola, linda! No era Rosadela jajaja, lamento no cumplirte la idea. Ya verás que sexy estarás en el vídeo. Y… respecto al novio de los chocolates, creo que ya no existen :( jajaja. Un beso, linda.

Ainelen: ¡El tiempo corre! Un beso, linda. Pronto volverás con Just, lo prometo.

Carla: Jajajaja, descuida. No creo casarme con Justin y mucho menos con Harry jajaja. ¡No llores! :( jajaja. ¿Querías morirte? ¿Qué es eso? :| ¡cuéntame urgente! Voy a matarte. Un beso.

Capítulo 182°: Respuestas.

Rosa: ¡Gracias, amiga! Te adoro.

Sara: ¡Hola! Jaja, lamento decirte que fuiste el segundo :( ajajaj. También amo a Jaden, es sexy :) jaja. Así es, debes esperar y todo será mejor que antes. ¿Flojera de leer? Amo los comentarios largos :) jajaja. Un beso, linda. Te quiero.

Anónimo: ¡No llores!

Sarahi: Sí, linda. Regresarás pronto con Justin jaja. Un beso, te quiero.

Ainelen: ¡Ya volverás! No desesperes jaja. Un beso.

Mony: ¡No sufras! :( pronto todo estará bien. Un besito, linda. Te adoro.

Anónimo: ¡Pronto todo estará bien! No llores más jaja. Un beso.

Dahi: Aún falta para el final jaja, hay novela para un buen rato, lo aseguro. Un besito, te quiero montones.

Anónimo: ¡Pronto haré maratón! Lo prometo jaja. Y no me estresas. Justin no cambiará, lo aseguro. Un beso, linda.

Liset: Un beso enorme, linda.

Vitha: ¡Hola, linda! No llores, no hay por qué llorar. Un besito.

Ale: ¡No llores, no llores! Un beso, linda. Gracias.

Valentina: ¡No, no me gusta hacerlas sufrir! Jaja. Un beso, linda.

Eloiise: ¡Hola, linda! Espero ver tu programa pronto jaja. Un beso, lindita. Te quiero.

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Diarioblog: http://hablandodemiconmigomisma.blogspot.com.ar/

Y… bien, es todo. Gracias y las amo n_n. ¡Ah! Casi lo olvido, haré la página ahora mismo. Les dejaré el link la próxima entrada, ¿ya? Las amo n_n

—Poly—

P/D: COMENTENN!